CHIANG Shun-ju, con sus 67 años cumplidos, tiene una cara curtida por el sol y el viento lacustre, llena de surcos profundos; las órbitas de sus ojos rojizas, la vista acostumbrada a mirar lejos. En...
Please login first!
CHIANG Shun-ju, con sus 67 años cumplidos, tiene una cara curtida por el sol y el viento lacustre, llena de surcos profundos; las órbitas de sus ojos rojizas, la vista acostumbrada a mirar lejos. En...